Freddy Ojeda desempeña el rol de agente de circulación textil, cuya labor principal radica en la organización, recopilación, almacenamiento y gestión de textiles en desuso para prolongar su ciclo de vida. Este trabajo se enfoca en evitar el desperdicio de ropa que podría ser desechada, fomentando su reutilización y redistribución en diversos contextos. A través de un sistema eficiente, se reciben prendas en donación que inicialmente no tienen circulación activa, otorgándoles una oportunidad de reaprovechamiento.
Como parte de este proceso, se establece una red de recuperación textil que convoca a sus participantes a revisar las prendas disponibles para identificar aquellas que puedan serles útiles, ya sea para uso personal o como materiales para proyectos creativos o comerciales relacionados con marcas. Además, una porción significativa de esta ropa se destina a la venta, ampliando su utilidad en la comunidad. Esto se complementa con la gestión de donaciones a hogares y colegios que activan el concepto de ropero solidario para circular vestuario de temporada. Se coordinan estas acciones con el objetivo de optimizar el impacto positivo en el manejo responsable de textiles.
Cuando los textiles agotados no pueden ser reutilizados en su forma actual, se derivan al infrarreciclaje, donde se procesan como picadillo de ropa. Esta metodología asegura que incluso en su etapa final, los materiales puedan tener un propósito adicional. Bajo esta gestión, Freddy Ojeda supervisa un flujo de aproximadamente 200 kilogramos de ropa por mes, garantizando un enfoque integral y sostenible para el tratamiento de textiles en desuso.
